Un sencillo truco para calibrar la batería de tu teléfono Samsung y mejorar tu duración

Mejorar la duración de la batería de nuestros teléfonos es una batalla sin tregua, que se hace cada vez más difícil conforme nuestro equipo envejece y la misma progresivamente va perdiendo su capacidad de funcionar como antes.

Puede que a pesar de que la vetaría de tu teléfono se encuentre en buenas condiciones, notes que la duración de la misma de repente ha comenzado a reducirse considerablemente. Si ya repasaste los trucos para mejorar la duración de tu batería, y nada de esto ha dado buenos resultados, puedes agitar una última alternativa antes de considerar el cambio de batería, probando con una calibración de tu batería.

¿Por qué calibrar la batería de tu teléfono?

Android maneja internamente un archivo denominado Battery Stats, que lleva un registro del estado actual de tu batería, así como el número de recargas que has realizado. En algunas ocasiones, este archivo se corrompe o pierde sincronía con el estado real de la batería, y es aquí cuando comenzamos a tener problemas, pues Android nos da valores de carga de la batería que no son reales y hasta llega a pagar el teléfono antes de que la misma llegue a niveles bajos de carga, o a marcar como 100% de carga, cuando en realidad no es así.

El proceso de calibración de la batería en la mayoría de los móviles Android, implica corregir el archivo Battery Stats, para lograr registrar los valores reales de carga nuevamente, y evitar que Android ande perdido con el nivel de carga actual de la batería. Si se siguen los pasos que vamos a explicar a continuación (los cuales están pensados principalmente para móviles Samsung), podrás mejorar la duración de la batería de tu teléfono.

Cada marca de teléfono tiene sus propios métodos o aplicativos para realizar la calibración de la batería, y en algunos casos a falta de una herramienta oficial, debes recurrir a ser ROOT para poder usar herramientas de calibración de batería genéricas. No obstante, si tienes un smartphone Samsung, estas de buenas, pues estos equipos ya traen de fabrica el utilitario para hacer este proceso de calibración, y lo puedes usar sin necesidad de ser ROOT. El mismo procedimiento que vamos a explicar aplica para casi todos los modelos de la familia Samsung Galaxy, como el Galaxy S4, S4 mini, S5, S5 mini, S6, S6 Edge, S7, S7 Edge, S8, S8 plus, S9, S9 Plus, y seguramente muchos otros de las familias J y A.

Calibrar la batería de tu teléfono Samsung

Para realizar el proceso, es recomendable tener a mano el cargador original del teléfono, así que vamos a los pasos:

Un sencillo truco para calibrar la batería de tu teléfono Samsung y mejorar tu duración

  1. Cargamos la batería de nuestro teléfono Samsung hasta que llegue al 100%, y luego retiramos el cargador.
  2. Ingresamos a la aplicación para hacer llamadas telefónicas, y el dial ingresamos el código *#0228#
  3. Veremos que se inicia un programa que nos muestra el estado actual de la batería. En la parte inferior veremos un botón que dice “Quick Start”. Al oprimirlo veremos una advertencia que tenemos que aceptar para comenzar con el proceso de calibración de la batería.
  4. Al aceptar la advertencia, la pantalla del teléfono se va a pagar por unos segundos y luego se va a encender nuevamente.
  5. Una vez que se encienda la pantalla, si nuestra batería estaba descalibrada, veremos que el porcentaje de carga ha cambiado, por ejemplo, pasando del 100% al 80% o lo que sea que ocurra con tu teléfono en particular.
  6. Conectarnos nuevamente el cargador, y esperamos a que la batería llegue nuevamente al 100%. Cuando lleguemos a ese nivel de carga, vamos a repetir el proceso dando nuevamente el botón “Quick Start”.
  7. Debemos repetir el proceso tantas veces como sea necesario, hasta el que el nivel de carga se mantenga en 100% cada vez que oprimamos el botón “Quick Start”.

Con esto, habremos calibrado exitosamente la batería de nuestro teléfono, y con surte mejorado considerablemente su duración. En todo caso, este procedimiento no va a mejorar una batería que ya está llegando al final de su vida útil, o un teléfono que está lleno de aplicaciones mal optimizadas que la drenan constantemente.

 

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